Qué de la mano de Leo Messi
Una de las canciones más cantadas por estos días en Brasil por la hinchada, es aquella que reza que de la "mano de Leo Messi, todos la vuelta vamos a dar". Tomás Chávez no dará la vuelta, pero sí podrá decir que estuvo agarrado de la mano del "10". Mirá la historia de este pequeño argentino que habló con LA VOZ DE SAN JUSTO.
En el duelo contra Catar, mucha gente pudo cumplir el sueño de ver jugar a Messi por primera vez, pero hubo alguien que fue más allá. El misionero de 11 años, Tomás Chávez estuvo cara a cara con el rosarino.
Es que en la previa del juego y ante el protocolo de inicio, "Toto" fue quien tuvo el privilegio de salir de la mano del capitán argentino. Luego de inscribirse en el programa "mascotas", fue elegido y tuvo la fortuna de estar al lado del mejor del mundo.
En un hotel de Porto legre, horas previas a que regrese a su Posadas natal, Tomás habló con LA VOZ DE SAN JUSTO y AM 1050. "Es algo hermoso, que no se puede decir cómo fue. Es un sentimiento increíble, que no lo puedo explicar. Le pase la mano obvio a Messi, a Dybala, Di María, a Lo Celso lo saludé, era todo increíble".
A la hora de contar su contacto con el "10", indicó: "Le dije que lo amaba, que era mi ídolo, que nunca lo pude ver y que era la primera vez. Le dije un montón de cosas en realidad. Él solo se reía y me decía bueno. Me abrazaba y me tocaba la cabeza. Su mano es más grande que mi cabeza".
Pero su andar por el Arena do Gremio fue extenso, ya que tuvo que presentarse a las 10 de la mañana, o sea, 6 horas antes del juego. "Llegué a la mañana, entramos a un lugar donde teníamos muchas cosas para pasar el tiempo. Me hablaban todo en portugués, me decían que no íbamos a jugar, que teníamos que ensayar y después de almorzar sí podíamos jugar. Ensayamos como tres veces y no entendía porque estaba delante de todos. Ahí pregunté y me dijeron que iba a estar con Messi, pero que no diga nada. Hicimos todo, nos atendieron y una hora antes del partido nos llevaron al lugar donde teníamos que cambiarnos y prepararnos".
El momento del himno es algo con lo que los anti Messi siempre se jugaron una ficha. Es cierto, no lo canta, pero lo vive a su manera. El propio Tomás, que lo sintió de carca, explicó: "Él no lo canta, está con la boca cerrada, pero lo tararea al himno. Es una sensación muy linda, hay millones de chicos que quisieran estar en el lugar que por suerte me tocó a mí".