Recuerdos de Japón
De regreso a la Argentina, la sanfrancisqueña Valentina González repasó su experiencia en el país nipón junto a Las Panteras.
De
regreso en el país, volvió a retomar sus estudios de abogacía en La Plata y se
incorporó a Estudiantes para empezar con la competencia local. Atrás quedó la
Copa del mundo de Japón de voleibol, una experiencia única como enriquecedora
que supo capitalizar para su crecimiento deportivo y personal.
La líbero sanfrancisqueña Valentina González, en comunicación con LA VOZ DE SAN JUSTO, habló de lo vivido junto a Las Panteras y del aprendizaje acumulado, quizás el mejor recuerdo traído del país nipón.
-¿Qué conclusiones sacaste a nivel personal en esta Copa de Japón?
-Las conclusiones que saqué es que la diferencia con las potencias del mundo se la atribuyo, entre otras cosas pero en gran medida, al roce internacional que tiene cada país. Sabemos que quizá ellas entrenan en mejores condiciones pero así y todo, aunque por ahí nos costó sostenerlo, pudimos jugarle de igual a igual a cada país. Desde lo personal, lo mucho que tengo que mejorar con respecto a mi rol en todos los aspectos del juego ya sea técnico o mental, como la concentración entre otros.
-Se trató de un "Master" de vóley...
-Sin lugar a dudas se aprende muchísimo, pude ver el nivel de todas las líberos ya que en esta copa estaban casi todas las mejores del mundo en mi puesto y en mi rol de defensora, por eso creo que la experiencia fue enriquecedora en todo sentido.
-¿Pisar semejante escenario qué te generó interiormente?
-Realmente los estadios son imponentes, la organización del torneo impecable por donde se la mire, desde los hoteles hasta la comida, horarios de partidos, logística del torneo y la profesionalidad con que se maneja todo es digno de admirar.
Si bien los mundiales que jugué fueron muy importantes, esta experiencia en un país donde absolutamente todo esta organizado a la perfección, siento que me enriqueció como jugadora y también como persona.
-¿Quedaste satisfecha con tu desempeño?
-Sí, uno siempre quiere jugar y rendir lo mejor posible para el equipo, en mi rol de líbero defensora son pocas las oportunidades que tenes de tocar la pelota. La verdad que me costó contrarrestar la potencia de los remates y la visión de juego que tenían las atacantes de todos los equipos, pero haciendo un balance puedo decir que di lo mejor de mí en cada partido y el entrenador me dio la oportunidad de jugar todos los partidos, así que espero haber estado a la altura de lo que necesitaba el equipo de mi función.
-¿Compartir el puesto con Tatiana Rizzo que significó?
- "Tato" Rizzo estuvo entre las mejores 10 receptoras del mundo y eso me da mucho orgullo, porque poder compartir con ella el equipo en mi rol de líbero defensora me dio la oportunidad de aprender como manejarme dentro de la cancha, traté de asimilar cada uno de sus consejos ya que además de ser una gran líbero es una mejor persona. Me ayudó mucho durante todo el torneo y la verdad es que me siento afortunada de haber compartido con ella todo este proceso.
-En lo colectivo mostraron un digno desempeño entendiendo la diferencia que existe con selecciones europeas y asiáticas...
-Creo que a pesar de haberles jugado de igual a igual en todos los partidos, como a Serbia o Estados Unidos, aún existe una marcada diferencia en cuanto a la rapidez de su juego, la versatilidad de sus jugadoras y el nivel de roce internacional con muchas de nosotras que recién empezamos a jugar en la selección mayor.
A los equipos africanos pudimos ganarles ya que somos bastante parecidos en el juego y a pesar de que algunas son muy potentes en sus ataques, nosotras jugamos realmente muy bien.
-A propósito coincidís con Ferraro sobre una reestructuración en el voley femenino para lograr más calidad? ¿Qué opinión te merece como entrenador?
-La reestructuración del voley argentino es un paso muy importante que sí o sí se debe dar para mejorar calidad de jugadoras, pero yo creo que más allá de las cuestiones dirigenciales depende mucho de cada una de nosotras trabajar conscientemente en nuestros respectivos clubes para dar ese salto de calidad colectivo.
Por otra parte los conceptos que Hernán Ferraro nos da en cada entrenamiento son fundamentales para crecer, estamos por buen camino, con mucho para mejorar.
-Ahora queda el Preolímpico en Colombia. ¿Te ilusionas con poder estar esa competencia?
-Sí, uno siempre tiene la ilusión de ser convocado pero esa es una decisión del cuerpo técnico y llegado el momento el verá las jugadoras que cita, así que ahora es tiempo de recargar pilas en casa, jugar con mi club Estudiantes en el que se vienen partidos muy lindos e importantes y si tengo que volver a formar parte de la selección lo haré como siempre dejando todo en cada entrenamiento.