River se hizo fuerte en cancha de Banfield
Con un tanto de Gustavo Canto, en contra, el equipo de Marcelo Gallardo -que lidera la Liga Profesional- se impuso por 1-0 de visitante frente al "Taladro" y le sacó cuatro puntos de ventaja a Talleres.
River Plate, con distintas bajas por lesionados y convocatorias a seleccionados en fecha Fifa, alcanzó este sábado una ajustada victoria como visitante sobre Banfield, por 1-0, en uno de los encuentros adelantados de la decimoquinta fecha del torneo de la Liga Profesional de Fútbol (LPF).
El equipo dirigido por Marcelo Gallardo reúne 33 unidades y aventaja por cuatro al escolta Talleres de Córdoba, que el lunes recibirá a Atlético Tucumán.
La única conquista del equipo de Núñez llegó a los 17 minutos del primer tiempo, a través de una desafortunada acción del defensor Gustavo Canto, quien batió su propia valla ante remate del delantero Federico Girotti.
A sabiendas de que las ausencias podía complicarlo, River asumió el partido de otra manera: dejó el protagonismo de otras jornadas para calzarse el traje de equipo utilitario, que trató de sacarle provecho a sus aproximaciones a la valla adversaria.
Luego de un arranque a todo ritmo, con dos equipos jugados a buscar el desnivel, el visitante se mostró más punzante, con un Girotti gravitante y un Agustín Palavecino que intentó tomar contacto asiduo con el balón.
Cuando se jugaban apenas 2 minutos, el conjunto del DT Gallardo tuvo la primera chance para marcar con un disparo de Rollheiser por franja central, que halló una buena respuesta del arquero Altamirano.
Como contrapartida, a los 11m., el equipo local llegó por primera vez con un remate rastrero y esquinado de Juan P. Álvarez, que encontró bien ubicado al arquero Bologna.
A los 17m. se produjo la acción que definió el cotejo: un remate de Palavecino fue contenido a medias por Altamirano, quien dio un rebote largo que aprovechó el rubio Girotti para abrirse y, con una gambeta, desairar al golero. El disparo del delantero corría paralelo al arco, pero el apuro de Canto terminó enviando el balón a la red y se erigió en el único festejo de la tarde.
Después del tanto, River justificó la diferencia, no sólo otorgándole mayor fluidez al traslado sino cortando los eventuales circuitos que podía diseñar el 'Taladro', que no contó con Jesús Dátolo, lesionado.
A los 33m., un tiro libre de Urzi exigió una muy buena respuesta del arquero Bologna, quien envió al córner con una mano, cuando el balón se cerraba peligrosamente.
Pero el "Millonario" siguió siendo dominador, con un Casco gravitante con sus proyecciones por derecha; un Palavecino intenso en el despliegue y en la generación, además de un Girotti potente, que se movió con criterio por todo el frente de ataque.
Con el ingreso del colombiano Cuero, el equipo local buscó darle mayor profundidad a sus avances. Precisamente, el colombiano envió un centro desde derecha al que no llegó bien pisado el juvenil Cruz y que le permitió al guardavallas visitante quedarse con el balón.
En el segundo período, las acciones se tornaron algo más friccionadas e imprecisas. el conjunto riverplatense eligió recostarse más atrás, cederle a Banfield la posesión de la pelota.
Pero ese contexto terminó perjudicando al local que cargó con tozudez pero poco ingenio. El equipo de Gallardo, cansado por el despliegue físico, empezó a recurrir cada vez con mayor asiduidad a la infracción táctica para sostener un resultado que le permitió consolidarse en lo más alto, aun cuando no tuvo el brillo de otros partidos.