Sin margen de error
Comienza la actividad en Budapest para el GP de Hungría y la lucha por el campeonato se pone intensa: Vettel y Hamilton esperan una equivocación del otro para sacar diferencias.
Hungría marca el inicio de la segunda parte de la temporada de la Fórmula 1. A partir de este momento cualquier error puede ser definitivo para decidir el campeonato de pilotos. Sebastian Vettel y Lewis Hamilton, de Ferrari y Mercedes, respectivamente, se encuentran en la contienda directa con apenas un punto de diferencia después de la demostración del británico en el circuito de Silverstone.
Ferrari parece haber perdido el impulso que tuvo al inicio de la temporada y desde el Gran Premio de Mónaco, sexta fecha del calendario, apenas han sumado dos podios, ninguno de ellos en lo más alto.
En contraparte, sus rivales en Mercedes han conseguido en ese mismo periodo tres victorias, dos de ellas con Hamilton, así como otros tres podios, cortesía de Valtteri Bottas, un hombre que en poco tiempo ha pasado de preocuparse por su futuro en 2018 a ser un contendiente por el campeonato en esta misma temporada.
Hungría podría ser una historia a favor del Cavallino Rampante. Las complicadas curvas del circuito, sumado a la falta de largas rectas donde la potencia sea requerida al máximo, ponen a Ferrari en una mejor posición respecto a las últimas carreras en donde la fuerza de la unidad de potencia Mercedes ha brillado.
Pero para el cuatro veces campeón del mundo no será del todo sencillo en el circuito de Budapest. En los últimos cuatro años sólo ha sumado una victoria, justo en 2015, en su primer año con Ferrari.
Hungría también marcará un antes y un después en el momento anímico de los competidores. Vettel tiene la urgencia de sumar un triunfo antes del inicio de las vacaciones de verano mientras que Hamilton podría salir enormemente fortalecido si es que consigue una nueva pole position para igualar así las 68 de Michael Schumacher, el máximo de la lista.
Este logro podría darle el impulso necesario al británico para volverlo casi indestructible, como sucedió en 2015, año en el que logró su tercer campeonato eliminando de forma rápida a su compañero Nico Rosberg.
La otra cara
Pero mientras al frente dos escuderías buscan la gloria, detrás, un equipo que antes era exitoso, McLaren, pone sus esperanzas en Hungría para obtener lo que, ellos llaman, podría ser su mejor resultado. No, no se trata de una victoria, sino de apenas alcanzar una suma importante de puntos con sus dos pilotos: el español Fernando Alonso y el belga Stoffel Vandoorne.
En Silverstone, el asturiano penalizó con 30 posiciones por los cambios que realizó Honda; su equipo entonces prometió que este fin de semana sería diferente para el bicampeón del mundo, sin embargo, la paciencia de Alonso comenzó a agotarse y todo indica que, al menos de que los de Woking emigren a otra unidad de potencia, el español tiene todo listo para dejar la escudería y buscar un lugar donde pueda ser competitivo.